Luego de un agotador ciclo en la universidad, nada mejor que un torneo (y si es con dinero de por medio, mejor) para relajarte y aliviar el éstres.
Así que ayer empezó el torneo, una hora y media por jugador, sin incremento. La reunión estuvo llena de jugadores veteranos que buscan divertirse y de jóvenes dispuestos a ganar dinero fácil. Yo soy un poco de ambos, me gusta jugar para divertirme y si puedo sacar algún provecho económico, esta bien.
En fin, luego de más de un año, aproximadamente 15 meses y 15 días volvía a estar frente a un tablero. Debo mencionar que entreno (o por lo menos lo intento), pero no lo hago con un tablero real sino con uno virtual. Así es, practicó con la computadora o con amigos por internet, ya que el ajedrez no es parte de los juegos que se practiquen por mi zona.
Entonces, comencé un nuevo torneo. Estadísticas, he jugado seis torneos desde que comencé mi "carrera" (el años pasado), he ganado dos torneos, he quedado segundo en otro y en los demás mejor no recordar.
Así que, como hace tiempo lo hice, me gustaría volver a publicar mis anécdotas en los torneos, con los jugadores, con mi juego, en este blog. Para dar una visión de lo que es la vida de un ajedrecista no profesional que intenta jugar el ajedrez para los que no lo saben. Y para los que lo saben, intercambiar experiencias, consejos, trucos, tácticas. Todo es bienvenido, como siempre digo.
Para terminar y como una información secundaria, gané la partida teniendo desventaja en tiempo contra mi oponente. En el siguiente post de este tema, pondré los movimientos del juego. Ahora debo irme, porque en un par de horas es la segunda ronda.
Estas mesas son clásicas en cualquier parque. Por mi casa también lo son, pero casi (nunca) nadie las usa para jugar. Lamentable, pero cierto
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